Manchester City 3-1 Leicester | Análisis Táctico

3-1-6

Guardiola planteó el 3-1-6 con balón que ya utilizó en otros partidos al enfrentarse a una línea de 5.

Manchester City

Organización ofensiva

La primera clave de esta estructura es la posición de Haaland. Si se sitúa en el intervalo entre centrales es para fijarlos y que la línea defensiva vaya retrociendo hacia el área, manteniéndoles lejos de los mediocentros del City, para que estos puedan recibir entre líneas.

Mientras que si está a la altura del resto de la línea de ataque o bajando a recibir es para involucrarse más en el juego, asociarse y progresar hacía área con balón.

La idea principal del City es juntar varios jugadores en banda izquierda, sobrecargar y esa zona, mientras que Walker, que es el lateral derecho, tiene que esperar en la banda contraria posicionado muy alto, dando amplitud, creándose superioridades de 6 contra 5. Así Walker queda aislado para recibir, bien a través de un cambio de juego hacia su banda o en situaciones de centro desde la izquierda en las que Walker entra en área para poder rematar sin marca.

Cuando los centrales o Rodri tienen el balón y la estructura defensiva del Leicester está muy estrecha, no permitiendo pases a Mahrez, De Bruyne o Silva, la mejor decisión es el pase para Walker o Grealish. El extremo izquierda aprovechó muy bien los espacios para entrar en área con conducciones y generar jugadas de peligros como en la jugada del penalti.

Tras los 2 primeros goles Bernardo Silva cambia su posición y tanto en la salida de balón como en campo rival pasa al doble pivote como hizo durante la segunda parte junto a Kalvin Philips.

Dominio total del City para superar una defensa de 5, con otro gran plan de partido de Guardiola.